En una ceremonia que debía celebrar el compromiso juvenil, Ana Karen Sotero Salazar, ganadora del Premio de la Juventud en el Congreso de la Ciudad de México, convirtió su discurso en un llamado urgente a la conciencia política. Lo que debía ser un momento de reconocimiento se transformó en una interpelación directa a los diputados presentes. “Necesitamos verdadera justicia, pero la justicia no sólo se va a quedar en este lado, se tiene que salir”, expresó Ana Karen con firmeza.
El momento fue captado en Ganadora del Premio de la Juventud zarandea a diputados donde se observa cómo la joven exige acciones concretas contra el crimen organizado, mientras denuncia la indiferencia de los legisladores durante su intervención. “Me parece una falta de respeto que cuando estamos aquí, incluso recibiendo el premio, no nos hagan caso, están en sus propias conversaciones. ¿Qué clase de actitud es esta?”, reclamó.
Este gesto no fue aislado. Ana Karen Sotero Salazar, de 23 años, recibió el Premio de la juventud, se refuerza el tono de indignación y dignidad con el que la joven se dirigió al pleno. Su discurso se viralizó rápidamente, convirtiéndose en símbolo de una juventud que no se conforma con aplausos vacíos.
Reflexión editorial.
Lo que Ana Karen hizo no fue sólo hablar: fue romper el protocolo para exigir respeto, justicia y acción. En tiempos donde la política parece desconectada de la realidad, su voz representa a miles de jóvenes que no quieren premios, sino resultados. Su frase “la justicia no sólo se va a quedar en este lado” puede leerse como una metáfora poderosa: la justicia no debe estar encerrada en discursos ni ceremonias, debe salir, actuar, transformar.